Todo Cuanto Nos Rodea Es Magia

Todo cuanto nos rodea es magia. Y a la magia vamos, de la magia venimos. Todo es magia y todo se encuentra perfectamente interconectado.

Cuando comprendemos que la magia existe y nos rodea en cada uno de los días, comprendemos una de las grandes verdades del universo mismo. Pero no olvidemos que la magia, si bien ha sido cuidadosamente formulada, cuidadosamente creada, NO se rige  por control. 

Todo aquel que habita inclusive en la Tierra tiene a su alrededor infinita magia, infinitas interconexiones fundadas en la magia, en la magia que ES. Pero cuando a la magia se la intenta controlar, se la intenta regir, se le intenta establecer los puntos de interconexión, ya no ES.  La magia fluye en esta interconexión entre puntos, no fluye a través del control. El circuito «controlado» se quebraría, y una vez así, intentaría tender nuevamente al equilibro. El SER, como tal,  integra también ese conjunto perfecto interconectado de magia y el SER debe fluir en esa misma magia, comprendiendo su existencia y comprendiendo que ahí también durante, y en la experiencia humana, se encuentra el aprendizaje, se encuentra la evolución.

El fluir, la magia, significa que todo, en su medida, encierra esa perfección. No significa que no exista evolución, que no encierre aprendizaje, que no encierre “pérdidas”, “sufrimiento” o lo que sea que correspondiera. En esa interconexión, en ese fluir, se encierra eso y mucho más.

El universo ante todo ES y fluye en armonía, y en el comprender lo que el universo ES, radica la receta, la fórmula de la magia.

Busca en cada uno de los actos del universo y de lo que te rodea, la presencia de la magia. Verás como la magia te rodea constantemente, pues la magia está en ti, la magia es en ti, la magia es en el universo todo.

Gracias.

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